Bella Gramado

Bodegas Gaucho que conforman la Carta de Vinos:

BODEGA CRISTÓFOLI

Originaria de la región del Véneto, en el norte de Italia, la familia Cristofoli llegó a Bento Gonçalves en el siglo XIX. En 1896, Angelo Cristofoli pagó 100 mil reales por la propiedad familiar en la región de Fernandes Lima, en el actual municipio de Monte Belo do Sul (en aquel entonces Bento Gonçalves). Las generaciones se sucedieron hasta que, en 1947, dos años después de su matrimonio con Maria Salton, Duílio Cristofoli compró la propiedad donde la familia reside hoy en el distrito de Faria Lemos de Bento Gonçalves. En 1986, sus hijos Loreno y Mário Luiz abrieron un pequeño negocio vinícola en el sótano de la casa paterna, vinificando las uvas de mesa que cultivaban. Con mucha perseverancia, trabajo duro y amor, tras años de inicios desafiantes, las familias de los dos hermanos permanecen unidas, creando un lugar único que combina viñedos, vinos y lo mejor del enoturismo.

Los vinos se elaboran en la propia bodega, con uvas cultivadas por la familia y también con uvas adquiridas a productores de las regiones de Serra y Campanha Gaúcha. El estilo vitivinícola de la empresa busca siempre realizar la vinificación con mínima intervención para producir vinos muy frescos y distintivos, respetando la aptitud enológica de cada variedad. La crianza en barricas de roble francés es bienvenida, pero no para todas las etiquetas; entendemos que siempre debe respetarse la perfecta armonía entre las notas de roble y la fruta. Actualmente, toda la vinificación es llevada a cabo por la propia familia, con los tres sucesores, Bruna, Letícia y Lorenzo Cristofoli, como enólogos, cada uno ocupando diferentes áreas del negocio. Bruna dirige el área administrativa y comercial de la empresa, Lorenzo gestiona la parte operativa de la vinificación y la viticultura, incluyendo la supervisión de todos los proveedores de uva de la empresa, y Letícia, la más joven del trío, es responsable del enoturismo y la tienda de vinos. Todas las decisiones estratégicas sobre la vinificación son tomadas conjuntamente por los tres enólogos.

BODEGA MONTE CHIARO

"Monte Chiaro Vinhos Finos" es una bodega familiar fundada con el propósito de combinar calidad, creatividad, historia y arte. Inspirados por nuestras costumbres y fascinados por el vino, presentamos en nuestro nombre, arquitectura, cada etiqueta y nuestros vinos un concepto que conecta nuestro pasado con el presente, valorando los rasgos culturales heredados de la inmigración en la Serra Gaúcha, tan presentes en nuestra estructura familiar hasta el día de hoy.

Nuestras uvas provienen de tres importantes terroirs de Rio Grande do Sul: Serra Gaúcha, Campanha Gaúcha y Serra do Sudeste. Los vinos Monte Chiaro se elaboran en una bodega asociada, que alberga nuestro equipo, tanques y barricas.

Nuestra vinoteca se encuentra en Via Trento, en Vale dos Vinhedos, Bento Gonçalves, RS. La propiedad siempre ha pertenecido a la familia Dal Magro, ya que fue la parcela otorgada a sus antepasados inmigrantes italianos a su llegada a Brasil. Ubicada en la cima de una colina, entre araucarias, en Monte Chiaro podrá disfrutar de una agradable experiencia enoturística con vistas al Vale dos Vinhedos y una hermosa puesta de sol. Allí, los turistas pueden degustar vinos de alta calidad, disfrutar de la comodidad de la vinicultura y vivir experiencias que conectan el vino, el arte y la gastronomía. Con el objetivo de combinar vino y arte, cada etiqueta de Monte Chiaro es una obra de arte, firmada por el talentoso artista Antonio Giacomin, de Caxias do Sul. El artista, referente en la técnica de la acuarela, utiliza el vino Monte Chiaro como pintura. Las obras de arte que dieron origen a las etiquetas se exhiben en nuestra tienda para el disfrute de nuestros visitantes. En todas ellas se encuentran costumbres, historia y experiencias familiares.

BODEGA JORGE BISCHOFF

Además de su experiencia en calzado y bolsos, el grupo Jorge Bischoff también ofrece Bischoff Wines, una gama de vinos y espumosos. La selección incluye cuatro estilos de vino, producidos en su propio viñedo en el Valle de Uco, Mendoza, Argentina, junto con dos espumosos, elaborados en la Serra Gaúcha.

Producidos en Pinto Bandeira (RS), los espumosos Brut Rosé y Moscatel combinan el terroir local con la experiencia del galardonado enólogo chileno Mario Geisse y su familia. El espumoso Brut Rosé se describe como intenso y delicado a la vez, con notas de frutos rojos y toques especiados. El Moscatel posee un aroma impactante que recuerda a flores blancas y cítricos. El resultado es una bebida vibrante y de excelencia, con frescura y elegancia. Además de la línea de vinos y espumosos, el grupo abre al público el Bischoff Wine Bar y su Boutique de Vinos y Espumosos, ambos ubicados en el entrepiso de la tienda conceptual Jorge Bischoff, en el corazón de Gramado.

BODEGA DOM GUERINO

Originaria de Trento, en el norte de Italia, la familia Motter, que reside en la región de la Serra Gaúcha desde 1880, se dedica al arte de la vinificación. Osvaldo y su esposa Salete, junto con sus hijos Bruno, Maicon y Lucas, son los fundadores y administradores de la bodega, comprometidos con la excelencia. Las primeras vides fueron cultivadas por Guerino Motter, padre de Osvaldo y gran homenajeado en nombre de la bodega, quien vendió la bebida a granel en la década de 1970. Pero fue en la década de 2000, en plena revolución vinícola nacional, que la familia decidió invertir en la producción de vinos finos, adquiriendo terrenos en Alto Feliz y construyendo una de las bodegas más hermosas y modernas del país, con una arquitectura orientada al enoturismo. Con una mirada visionaria, nuestro patriarca Osvaldo Motter siguió los pasos de su bisabuelo, haciendo de la tierra de Alto Feliz un destino imprescindible para los amantes del vino y del enoturismo.

Salete Motter es la matriarca y la fuerza femenina de la familia. Con una mirada atenta al enoturismo, es responsable del ambiente familiar y la cálida bienvenida a los visitantes. Una de las características que hacen que la bodega sea tan especial para clientes y empleados es el hecho de que la familia Motter trabaja unida y se dedica al proceso de elaboración del vino.

“Toda nuestra familia se embarcó en este proyecto soñado, en el que buscamos expresar nuestra identidad como unidad familiar y nuestro amor por el mundo del vino”.

VINÍCOLA FAMILIA BEBBER

La bodega Bebber se encuentra en la campiña de Flores da Cunha. Su historia comenzó en la mansión de los abuelos y es fruto de la unión de la tradición familiar en el sector vitivinícola y el espíritu innovador que surge con una nueva generación en un proyecto del joven enólogo Felipe Bebber junto a su familia. Con etiquetas creativas y excelentes vinos, la bodega ha cobrado relevancia en los últimos años. Junto a la encantadora mansión, encontrará una vinoteca con terraza, deliciosos aperitivos y un nuevo espacio de arquitectura moderna donde podrá participar en catas de vino y experiencias entre barricas. Bebber es uno de esos lugares que debe incluir en su itinerario por la Serra Gaúcha.

Buscando lo mejor de cada terroir del estado de Rio Grande do Sul, la bodega, aún joven, ya ha demostrado que sus vinos tienen una identidad única. Galardonada con numerosos premios en los últimos años, fue elegida Bodega Revelación en 2016 por la Grande Prova de Vinhos do Brasil. La propuesta de la familia Bebber es elaborar vinos que atraigan al consumidor brasileño: jóvenes, ligeros y elegantes. Según el enólogo, incluso los más estructurados deben seguir esta vocación, con acidez y cuerpo equilibrados.

BODEGA AMITIÉ

Procedentes de familias de viticultores de Bento Gonçalves (RS), los amigos Juciane Casagrande Doro y Andreia Gentilini Milan combinaron su experiencia y conocimiento del mercado para crear Amitié, una marca de vinos y espumosos, en 2018. Actualmente, cuenta con 15 productos (siete espumosos y ocho tranquilos). La experiencia de sus socios, Andreia (sumiller) y la enóloga Juciane, dio como resultado el proyecto Vitis, una línea de espumosos versátiles, frescos y afrutados. Posteriormente, en 2020, se lanzó la línea de vinos Amitié, con etiquetas variadas y modernas que transmiten frescura y juventud. Amitié es una línea exclusiva de espumosos y vinos premium producidos en la Serra Gaúcha.

Juciane, enóloga, también creció rodeada de la producción de uva. "Ayudaba a cosechar uvas durante mis vacaciones en casa de mi tío", comentó, tras haber estudiado comercio internacional. Llevan más de 20 años trabajando en el mercado del vino. A pesar de ser de la misma ciudad, se conocieron en 2006, a través del consorcio Wines of Brasil, donde trabajaron juntas para promocionar el vino brasileño en el mercado internacional. En aquel entonces, Juciane era directora comercial de una bodega brasileña y Andreia lideraba un grupo de bodegas que buscaban posicionarse en el mercado internacional. La alianza para crear Amitié (amistad, en francés) nació allí, cuando se dieron cuenta del gran potencial de crecimiento de los vinos de Serra Gaúcha y de que podían participar en este crecimiento de la calidad de la producción vinícola.

BODEGA CAVE GEISSE

Cuando el agrónomo y enólogo chileno Mario Geisse llegó a Brasil en 1976, fue contratado para dirigir Moët & Chandon do Brasil. En sus primeros años, se dio cuenta del gran potencial que tenía la región sur para el cultivo de uvas de alta calidad, especialmente para la elaboración de vinos espumosos. Con esto en mente, comenzó la búsqueda de la ubicación ideal para aprovechar al máximo el potencial de la región. Tres años después, en 1979, fundó Vinícola Geisse en el entonces poco explorado terroir de Pinto Bandeira. Pionero en optar por espalderas altas, ahora divide su tiempo entre Brasil, Chile y otros países. En su país natal, continúa cultivando uvas para la elaboración de vinos de alta calidad, como Carmenere y Cabernet Sauvignon, cuyo terroir se encuentra en la región de Marchigue, en el Valle de Colchagua. En 1981, comenzó a experimentar con la producción de los primeros vinos espumosos mediante el método tradicional y quedó inmediatamente fascinado por la calidad que el terroir que eligió era capaz de producir. En ese momento, se dio cuenta de que el reconocimiento de esta calidad sería solo cuestión de tiempo. En 1998, tuvo lugar la cosecha de Cave Geisse Brut 1998, un vino espumoso que se mantuvo en bodega durante 12 años y demostró el enorme potencial del terroir de Pinto Bandeira para producir vinos espumosos de alta calidad, capaces de evolucionar brillantemente con el tiempo, y fue responsable de despertar el interés y los elogios de los principales críticos de vino del mundo. Desde entonces, la bodega ha ganado varios premios, como el Master of Wine 2011. Jancis Robinson la incluyó en su lista de 15 bodegas que, en su opinión, pueden marcar el futuro del vino, siendo Família Geisse el único productor de vino espumoso en la selección presentada por los críticos. En el importante evento Wine Future, celebrado en Hong Kong, Cave Geisse Brut fue el único vino espumoso del mundo en figurar en la lista de 15 vinos recomendados. Lo mismo ocurrió en 2014, cuando la bodega fue nominada al título de "Bodega del Año del Nuevo Mundo" por la prestigiosa revista estadounidense Wine Enthusiast. Este fue un logro sin precedentes para la industria vitivinícola brasileña. Ese mismo año, Cave Geisse Brut recibió la increíble puntuación de 95 puntos de la prestigiosa revista inglesa Decanter. Entre estos premios de 2018 se encuentra la presentación de la DO Altos de Pinto Bandeira a entidades de investigación y definición. Este fue el inicio de la primera Denominación de Origen del Nuevo Mundo específica para vinos espumosos, similar a la de Champagne en Francia. Esta DO representa los diferenciales de calidad de este terroir, identificados por Mario Geisse en la década de 1970.

BODEGA OTTO

Otto: autenticidad en cada botella. Experimente la autenticidad. La alquimia de elementos cuidadosamente seleccionados crea una experiencia que conecta a los amantes del vino con uno de sus objetivos más fascinantes: compartir. Fue a partir de este sueño que los tres socios e hijos de los enólogos André Valduga, Fabiano Valduga y Gisele A. Valduga decidieron combinar talento, amor y conocimiento y fundaron Adega Refinaria. La aventura pronto se convirtió en un propósito en las carreras de estos profesionales, quienes tienen sus propias historias de vida escritas entre los viñedos y las creaciones de sus antepasados. Por ejemplo, su abuelo, Albino, quien producía vino en su sótano, fue una gran inspiración para ellos. La experiencia adquirida y los años de éxito en el mercado impulsaron la creación de una marca que transmite la esencia y el alma del trabajo desarrollado. En 2016, comenzaron el proceso de creación de un vino espumoso para celebrar el décimo aniversario de Adega. Sorprendidos una vez más por la autenticidad que ciertas combinaciones pueden brindar, las botellas abiertas en 2019, aún en fase de maduración, en el octavo aniversario de la compañía, deleitaron a los presentes. Así nació Otto. Del italiano, ocho, en referencia a las raíces tan apreciadas por la familia y recordando el hito que dio impulso a un sueño que se hace realidad cada día. Representada por el mandala, la marca captura los diferentes matices que ofrecen productos originales, jóvenes y frescos, que permiten a las personas viajar entre aromas y sabores, rescatar recuerdos y despertar a la naturaleza del encuentro. Fáciles de beber, las etiquetas de la Línea Otto complacen a diferentes paladares. Las botellas concentran la delicadeza y la exclusividad que envuelven momentos irremplazables. La combinación de lo contemporáneo, que le da a Otto la vivacidad que se espera de su juventud, con la plenitud de las bases esenciales de los vinos de alta gama, brinda naturalidad y una compleja combinación de notas, dando como resultado productos sofisticados. Somos una marca auténtica, fascinada por embotellar verdaderas obras de arte. La singularidad se percibe en los detalles, desde el concepto del vino hasta el diseño de la botella. Con cada propuesta, singularidad. Con cada espera, magnetismo. Con cada brindis, exuberancia. Siente a Otto.

VINÍCOLA LUIS ARGENTA

Rindiendo homenaje al patriarca de la familia, nació Luiz Argenta Vinhos Finos, un emprendimiento que combina la tradición de uno de los mejores terroirs de Brasil con las más modernas técnicas para producir vinos finos.

Inspirado por el pasado y con la mirada puesta en el futuro, combinando determinación y audacia, Luiz Argenta transforma la uva en una experiencia única, creando una de las bodegas más modernas y hermosas de Brasil. Fundada en 1999, cuando los hermanos Deunir y Neco, hijos de Luiz Argenta, tuvieron la oportunidad de adquirir las tierras de la antigua Granja União. En aquel entonces, la familia Argenta, cuyo principal negocio era el de las gasolineras, no tenía tradición vitivinícola, pero el lugar que luego se convertiría en la sede de Luiz Argenta ya era histórico y conocido por haber recibido las primeras uvas de vitis vinifera de Brasil. Actualmente, la bodega cuenta con aproximadamente 140 hectáreas de superficie total, con 55 hectáreas de viñedos propios donde se producen 17 variedades de uva. Ubicada en la ciudad de Flores da Cunha, RS, posee una arquitectura única y paisajes deslumbrantes que ofrecen a los visitantes una experiencia única. Es posible realizar visitas, catas guiadas, recorridos, vendimias, podas de vides y eventos privados, en armonía con nuestros vinos y un paisaje para contemplar.

BODEGA RADISH

El fundador y propietario de la bodega, Normélio Ravanello, ha estado involucrado en las actividades vitivinícolas de su familia en Antônio Prado, en la Serra Gaúcha, desde joven. Tras desarrollar una carrera profesional en ingeniería y como ejecutivo, ha mantenido una relación ininterrumpida con el vino. Junto con su esposa Rosa Maria, de origen familiar en Gramado, en 2005 iniciaron la vinificación en la propiedad adquirida en 1987. Las primeras vinificaciones, en 2008 y 2009, se realizaron en la bodega experimental de Embrapa en Bento Gonçalves, RS. La vinificación en la Bodega Ravanello comenzó en febrero de 2010.

Todos los vinos de Vinícola Ravanello (tintos, blancos y bases para espumosos) se elaboran en depósitos verticales de acero inoxidable, con control automático de temperatura. Algunos tintos y blancos específicos se elaboran en barricas de roble francés de alta gama, con capacidad de 400 o 500 litros cada una, utilizando el sistema integral de vinificación. Tras la fermentación, los vinos pueden estabilizarse en los propios depósitos de acero inoxidable o en barricas de 300 litros, de la misma calidad y origen que las utilizadas en el proceso integral de vinificación. La bodega también cuenta con un laboratorio para el control de calidad de los productos durante todo el proceso de vinificación. Todas las variables y procesos están controlados por un sistema de gestión específico para la vinificación, lo que garantiza un control total de la producción.

En los viñedos de la bodega, técnicos supervisan rigurosamente la uva durante todo el ciclo de producción. Durante la maduración, la calidad sanitaria y bioquímica se controla diariamente con métodos precisos. En los viñedos de nuestros proveedores, el seguimiento lo realizan técnicos locales, con el mismo rigor y priorizando la calidad total de la uva. Tras la vendimia, la uva se transporta inmediatamente a la bodega en cajas especiales y se refrigera en una cámara frigorífica. La uva de nuestros productores se transporta en camiones refrigerados a 10 °C. Posteriormente, se despalilla y se selecciona manualmente. Las uvas tintas se pueden transportar enteras a los depósitos de fermentación para obtener, durante la maceración, una extracción selectiva de taninos y colorantes. Las uvas blancas se prensan enteras en una prensa equipada con el sistema Inertys, que elimina los efectos nocivos de la oxidación durante todo el proceso de elaboración. Todo ello con el objetivo de obtener la máxima calidad de los vinos.

BODEGA DE ARTE LÍQUIDO

Arte Líquida es un proyecto familiar ubicado en Gramado, RS. Producimos vinos de forma artesanal. Nuestro objetivo es identificar las mejores regiones de Brasil para producir vinos auténticos y artesanales con la mínima intervención química y la máxima intervención humana. Vinos que reflejan la identidad de nuestra tierra. No buscamos emular países que no nos representan; buscamos nuestro propio estilo.

“Uva por copa”. El concepto de uva por copa que defiende Arte Líquida defiende vinos más auténticos, vinos con menos intervención química y más intervención humana. No utilizamos levaduras seleccionadas; creemos que las levaduras autóctonas presentes en la uva, el viñedo y el entorno deben expresarse de forma natural. “¡El vino quiere fermentar, es su naturaleza!”

¿Podemos usar barriles? Sí. ¿Podemos usar ánforas de barro? Sí. ¿Podemos usar recipientes de cemento? Por supuesto. También podemos no usar nada de esto. La última palabra la tiene la Madre Naturaleza y lo que nos regala cada año.

BODEGA ÚNICA DE ALMA

Fundada en 2008, la Bodega Almaúnica lleva en su ADN una pasión centenaria por el vino. Fue creada por los hermanos gemelos Magda y Márcio Brandelli en la ciudad de Bento Gonçalves. Hijos de Laurindo Brandelli y Doracy Brandelli, los hermanos crearon una empresa que combina la tradición familiar en la cultura del vino con propuestas innovadoras, basadas en el deseo de elaborar productos que expresen el amor y el cariño por la vid y el arte de elaborar vinos con alegría y placer. Magda y Márcio pertenecen a la cuarta generación de una familia que nació para producir vinos. Una historia que comenzó en 1887, cuando el inmigrante italiano Marcelino Brandelli llegó a la región de Bento Gonçalves, en la Serra Gaúcha, trayendo consigo su pasión por la vid. Tras pasar un tiempo trabajando en la bodega familiar, que lleva el nombre de su padre, los hermanos decidieron seguir su propio camino. La Bodega Almaúnica elabora vinos y espumosos con el máximo cuidado y dedicación, desde la vid hasta la botella. Combinando la tradición con las técnicas de producción más modernas para consumidores cada vez más informados y exigentes, Alma Única fue diseñada para producir botellas limitadas de cada vino y así convertirse en un referente en la elaboración de vinos finos y espumosos. En enoturismo, ofrece a los visitantes procesos modernos y un conocimiento centenario de la producción, de personas con una formación innata.